Si realmente querés generar un cambio en tu vida:
Reservá 1 bloque de trabajo.
Trabajá en 1 proyecto significativo.
Enfocate en 1 tarea que genere progreso.
Todos los días.
No necesitás mejores condiciones, necesitás más claridad.
No necesitás más tiempo, necesitás más foco.
Le gestión del tiempo está sobrevalorada.
Nos centramos demasiado en gestionar el tiempo, cuando la principal razón por la que no conseguimos lo que nos proponemos es: por la falta de foco.
Por caer en distracciones.
Por no hacer la cosa que mueve la aguja.
Al igual que con una cámara, podemos elegir dónde poner el foco.
- Algunos eligen ponerlo en la cosa que quieren y encuentran maneras de llegar ahí.
- Otros ponen el foco en todas las cosas que surgen en su camino y no pueden ver más allá de los obstáculos.
Si no elegís conscientemente donde enfocarte – vas a enfocarte en cosas aleatorias.
Mi Experiencia
Esta semana aprendí que “nuestra mente consciente tiene la capacidad de procesar 120 bits por segundo. Para entender a una persona que nos habla, necesitamos procesar 60 bits de información por segundo. Con un límite de procesamiento de 120 bits por segundo, esto significa que apenas puedes entender a dos personas que te hablan al mismo tiempo.”
Sea eso estricamente verdad o no.
O sean 80 bits por segundo.
O sean 160 bits.
Hay algo que está claro.
Nuestra atención es limitada.
La mayoría de las personas prestamos demasiado atención a cosas que no importan.
Este concepto resuena mucho conmigo porque muchas veces tuve (y tengo) la sensación de no avanzar.
Y, mirando hacia atrás, el motivo siempre fue uno: mi falta de foco.
Este tema es de mis favoritos.
Es difícil poner en palabras lo mucho que cambió mi vida cuando empecé a enfocarme.
El cambio más notable es la dirección de mis acciones: si vieras mi rutina seguro notarías la dirección en que quiero ir. Sin que te tuviese que decir nada. Es obvio. Y esto es posible por una sola cosa, de nuevo, foco.
¿Qué dicen tus acciones diarias sobre tus objetivos?
Esta es mi experiencia cada vez que logro mejorar mi capacidad de concentración:
Cuando tomás suficientes acciones en una dirección, suceden cambios.
Primeros pequeños (casi imperceptibles).
Después, un poco más grandes.
Ahora. Dicho esto.
Todo muy lindo.
¿Cómo me enfoco?
Cómo enfocarte
Enfocarte no es fácil, pero es simple.
Tenés que eliminar todas las distracciones.
Menos es más.
La dificultad de enfocarse está en elegir 1 cosa y enfocarte 100% en eso.
La clave está en la eliminación (o reducción) de todo lo demás, que, seamos sinceros, la mayoría son distracciones sin ningún tipo de valor (redes sociales, netflix, etc.)
Y esto es posible desprogramando y reprogramando tu ambiente:
Desprogramar y Reprogramar
La cantidad de información que hay es abrumadora.
O programás tu espacio o la información que está ahí fuera te termina programando a vos.
Hay pocas cosas más importantes en estos tiempos que cuidar tus espacios: mental y físico.
Para ambos casos, el patrón es el mismo:
- Des-programar.
- Re-programar.
Mental – Sumergirte en un ecosistema con solamente información de calidad y reducir lo extra (el ruido) te permite:
- Recuperar atención eliminando distracciones.
- Mejorar la calidad de tu atención en la información que realmente importa.
Es un poco tonto pretender estar en el estado mental adecuado para empujar tu proyecto (cualquiera que sea) si cada 20 minutos parás a ver qué está haciendo el perro de Juancito, o si recibiste un nuevo correo.
Si crees que tus ideas y tus resultados no cambian dependiendo de tu foco…
Estás equivocado/a.
Si tu espacio digital y social está alineado con tus objetivos, tus probabilidades aumentan.
Des-programar | Re-programar |
¿A quién seguís? | ¿A quién te gustaría seguir? |
¿Qué escuchás? ¿Qué lees? | ¿Qué te gustaría escuchar / leer? |
¿Con qué tipo de personas te rodeas? | ¿De qué personas te gustaría rodearte? |
Físico – Si tu ambiente no te está sumando en algún aspecto, probablemente esté restando.
Tu espacio está directamente relacionado con tu energía.
Es tu santuario.
Es tu templo.
Protegelo, nutrilo y usalo para alcanzar tu máximo potencial.
Des-programar | Re-programar |
¿Qué comidas y bebidas hay en tu casa? | ¿Cómo podrías mejorar tu alimentación? |
¿Cómo es tu espacio de trabajo? | ¿Cómo te gustaría que sea? (limpieza, olor, etc.) |
¿Cuánto ejercicio hacés? | ¿Cómo podrías moverte un poco más? |
Gestionando el foco: Intensidad y Descanso
Algo que me funciona extremadamente bien es trabajar en bloques.
Lo que hago es básicamente establecer bloques de 60-90 minutos en los que me siento a trabajar en una tarea y no hago nada más – elimino todo tipo de distracciones (comida, notificaciones, correo, etc).
En mi caso, que trabajo con varios clientes a la vez, la gestión de las notificaciones es crucial. No recibo notificaciones, reviso mensajes pendientes periódicamente una vez que terminé lo importante.
Esto hay que tomarlo con calma, no es tan fácil.
La concentración es un músculo y hay que entrenarlo todos los días para mejorar.
Dicho esto.
Te vas a sorporender de lo mucho que podés hacer en 90 minutos de esfuerzo concentrado. En serio.
Y otra cosa igual de importante, una vez que termina el bloque de trabajo intenso.
Tomá un descanso.
15 minutos.
El foco no es infinito.
Tenés que descansar entre serie y serie. Igual que en el gimnasio.
Estado de Flow
Cuando estamos súper concentrados, y utilizamos nuestras habilidades en un proceso que es desafiante para nosotros, y somos capaces de adaptar nuestro conjunto de habilidades a ese desafío, entramos en un estado de flow.
Este es un concepto psicológico de Csíkszentmihályi, donde habla del estado de tranquilidad y de absorción total cuando estás concentrado en una sola tarea y la estás ejecutando muy bien.
- Si el desafío es demasiado bajo para tu nivel de habilidades, te aburrís.
- Si el desafío es demasiado alto para tu nivel de habilidades, te genera ansiedad.
Es más intuitivo si lo ilustramos, acá un gráfico de su libro Flow (adaptado con mis dotes de diseño):
El progreso depende de dónde pones tu foco.
Necesitás más foco.
En serio.
– Nico